¿Quiénes están detrás de la venta de NOVO BANCO? ¿Por qué se quiere culpar a empresarios portugueses?

Según parece, personas como Antonio Costa, Fernando Anastasio, Rafael Mora, Luis Marquez Mendes, Fernando Negrao… y el Bloco de Esquerda es mucho lo que quieren ocultar. El pueblo de Portugal tiene derecho a conocer la verdad.

Novo Banco es un banco portugués creado el 4 de agosto de 2014 por el Banco de Portugal para rescatar los activos y pasivos del Banco Espírito Santo (BES). El Banco Espírito Santo era la segunda entidad financiera privada más grande de Portugal en lo referido a activos netos, así como uno de los más antiguos y prestigiosos bancos portugueses. El rescate de BES fue debido a pérdidas de 3.577 millones de euros. Por otro lado, los activos tóxicos de BES fueron transferidos a un «banco malo».

El rescate del Banco Espírito Santo se realizó después de varias semanas de noticias negativas sobre su estado financiero, particularmente su exposición a un gran número de compañías al mando de la familia fundadora del Banco Espírito Santo, con Ricardo Salgado al frente. El BES fue dividido en un «banco bueno», rebautizado como Novo Banco, y en un «banco malo», el cual albergaría las “exposiciones” (riesgos de pérdidas por impagos) del BES atribuidas al imperio empresarial del Espírito Santo, así como a su subsidiaria angoleña BESA. Novo Banco fue recapitalizado con 4,9 mil millones euros por un Fondo de Resolución del banco especial. El Estado portugués prestó 4.4 mil millones de euros al fondo. El consejo de administración del banco para el mandato de 2014-2017 estuvo presidido por Vítor Bento.

Un mes y un medio después de tomar posesión en su cargo, Vítor Bento abandonó el consejo de Novo Banco y fue reemplazado en septiembre de 2014 por Eduardo Stock da Cunha.

El Fondo de Resolución sería el accionista único del banco hasta que tuviera lugar una salida a bolsa. Este fondo fue creado en 2012 con contribuciones de bancos portugueses y del sector financiero, y sus operaciones están auditadas por el regulador portugués, el Banco de Portugal.​

Novo Banco incorporó a todo el personal, sucursales, depósitos, clientes crediticios y titulares de bonos senior que, estaban antes en el Banco Espírito Santo.

En agosto de 2014 Novo Banco lanzó su primera campaña de publicidad, para comenzar el principio del cambio en la imagen del banco.

​ En dicha campaña de cambio de imagen corporativa, el banco lanzó su nuevo logo el día 22 de septiembre, al que incorporó las alas de una mariposa con la forma de una potencia… la pretensión era subrayar el compromiso de la entidad bancaria de recuperar el liderazgo que tuvo hasta hace no mucho tiempo…  El cambio en la marca se hizo progresivamente, empezando por las fachadas en las sucursales del banco.

El 30 de junio de 2015, el fondo de resolución había recibido tres ofertas de compra por Novo Banco, una del grupo bancario español Banco Santander, una compra conjunta china del grupo de seguros Fosun International y el asegurador Anbang, y otra de la estadounidense Apollo Global Management.​ Uno de los licitantes mejoró su oferta el 7 de agosto de 2015. El proceso de selección y venta final tras el proceso de licitación se esperaba que tuviera lugar en el último cuatrimestre de 2015.

El 20 de agosto, el Banco de Portugal emitió un comunicado en el que declaraba que la fase final del proceso de venta estaría concluida el 31 agosto.

​ Sin embargo, en septiembre se canceló la venta a debido a que las ofertas no fueron consideradas satisfactorias…

En marzo de 2016, se anunció que la entidad bancaria rescatada Novo Banco planeaba realizar 1.000 despidos para reducir costes operativos en 150 millones de euros, como parte de su plan de reestructuración pactado con la Unión Europea.

Los recortes en plantilla propuestos afectaron al 14% del personal del banco.

En octubre de 2016, el Fondo de Resolución (organismo gubernamental, accionista mayoritario, con aportaciones de la banca privada…) había recibido cuatro ofertas para adquirir Novo Banco: una de Minsheng Financial Holding de China, otra de Apollo, de Centerbridge y de Lone Star Funds.

En enero de 2017 fue Aethel Partners el que realizó una oferta para comprar Novo Banco.

En marzo de 2017, el Banco Central de Portugal anunció que Lone Star Funds había comprado el 75% de Novo Banco, a cambio de una inyección de capital de mil millones de euros. El otro 25% sería retenido por el Fondo de Resolución del Banco de Portugal.

En octubre de 2017 se firmó el acuerdo y Lone Star Funds pasó a controlar el 75% de Novo Banco. Lone Star es una firma estadounidense de capital riesgo especializada en inversiones en real estate, capital, crédito y otros activos financieros. Fundada en 1995 y con sede en Dallas (Estados Unidos), el grupo cuenta con 17 fondos de inversión, que suman un capital de 70.000 millones de dólares.

El presidente del Gobierno de Portugal, Antonio Costa, se encargó de anunciar la venta. Costa señaló que se habían cumplido las tres condiciones que puso su Gobierno: no liquidar el banco, no tener impacto en las cuentas públicas ni en los contribuyentes y no conceder garantía alguna del Estado a Lone Star sobre futuros créditos impagados.

“Con esta venta”, añadió el primer ministro socialista, “se salvaguarda la estabilidad financiera en su conjunto y no será exigida a los bancos mas contribuciones extraordinarias al Fondo de Resolución.”

El Primer Ministro de Portugal, Antonio Costa, decidió no debatir, ni someter a votación, en la Asamblea de la República la aprobación de la venta por temor a una derrota anunciada, ya que no contaba ni con el apoyo de sus socios (los comunistas del Bloco de Esquerda), ni los de la oposición de centroderecha…

La venta y liquidación del que fue el segundo banco de Portugal y el primero privado, es el último desastre del imperio Espírito Santo, que manejó el país durante décadas con sus tentáculos en el mundo empresarial (principalmente a través de Portugal Telecom) y en el Gobierno de Sócrates, y que acabó quebrando en julio de 2014. Entonces, el Gobierno de Passos Coelho y el Banco de Portugal decidieron, en lugar de dejar caer el banco -que era fundamental para el tejido empresarial- dejar los activos tóxicos en el BES y crear el Novo Banco con los activos buenos y una inyección de 4.900 millones de euros. Desde 2014, el Novo Banco fue acumulado pérdidas enormes…. a todo ello acabó siguiendo el cierre de oficinas y el despido de empleados.

¿Por qué se ha pretendido, por parte de la coalición social-comunista que gobierna en Portugal, desviar la atención sobre empresarios, como Nuno Vasconcellos, cuando ellos son los verdaderos culpables de la liquidación de Novo Banco?

Novo Banco, en estos momentos es la «historia interminable» (como la novela de Michel Ende). Después de múltiples escándalos y peticiones de recursos públicos, nadie se fía de lo que puede esconder el balance de Novo Banco, por lo que cualquier potencial comprador necesitaría hacer una due diligence  (revisión en profundidad de los libros) y seguramente ofrecerá un precio muy bajo al tratarse de una venta a la desesperada…

El penúltimo episodio fue la compra de Novo Banco por parte de Abanca, el 5 de abril de 2021 banco español con sede social en Betanzos, La Coruña (Galicia), cuyo origen está en la caja de ahorros NovaCaixaGalicia, resultado del proceso de privatización en España de las antiguas Cajas de Ahorro…

Y, la historia continúa, nos vamos haciendo viejos, y los verdaderos responsables del desastre de Banco Novo (antiguo Espírito Santo) siguen sin recibir el merecido castigo…

CONTINUARÁ.

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